Médicos de familia recuerdan que los medicamentos contra la obesidad deben acompañarse de cambios en el estilo de vida
La advertencia llega en un momento en el que la popularidad de los fármacos antidiabéticos como opción para perder peso ha crecido notablemente.
Los medicamentos contra la obesidad no son una solución mágica y deben utilizarse con responsabilidad, bajo control médico y como parte de un abordaje multidisciplinar. Así de tajante ha sido el mensaje que ha lanzado la Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia (SEMG) durante su 31º Congreso Nacional. Los especialistas han advertido sobre el creciente uso inadecuado de estos tratamientos farmacológicos, especialmente aquellos originalmente destinados a la diabetes tipo 2, y han subrayado la necesidad de combinarlos siempre con cambios en el estilo de vida, como una alimentación saludable y un aumento de la actividad física.
La advertencia llega en un momento en el que la popularidad de los fármacos antidiabéticos como opción para perder peso ha crecido notablemente. Estos medicamentos, que actúan sobre el sistema nervioso central disminuyendo el apetito y retardando el vaciado gástrico —lo que aumenta la sensación de saciedad—, han demostrado su eficacia no solo en la pérdida de peso, sino también en la mejora de diversas enfermedades cardiovasculares. Sin embargo, su uso fuera de los cauces médicos está generando preocupación entre los profesionales de la salud.
