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General   Fundación para la Diabetes

Diabetes y deporte: tres historias de superación vinculadas a Galicia

  • A pesar de ser una enfermedad que sufren casi 600 millones de personas en el mundo, existen pocos ejemplos de atletas diabéticos
  • El ejercicio, con vigilancia, es clave para su tratamiento

La diabetes es la compañera permanente de viaje de muchas personas en el mundo. Según el Atlas de la Diabetes 2025 de la Federación Internacional de la Diabetes (IDF), se estima que unos 589 millones de adultos de entre 20 y 79 años conviven con ella. Supone el 11,1 % de la población global en este grupo de edad. De ellos, unos 252 millones no saben que la padecen.

Y no es un problema que vaya a menos: el IDF asegura que el número de adultos con diabetes crecerá hasta los 853 millones en 2050, un 13 % de la población total estimada. España es uno de los países con mayor tasa de diabéticos en Europa, con 4,66 millones de personas de entre 20 y 79 años que la padecen, un 13,1 % de la población en ese rango. Hay más de 189.000 diagnosticados con diabetes tipo 1 en todas las franjas de edad, y un gasto sanitario de más de 11.000 millones de euros.

Existen dos formas de diabetes: la de tipo 1, mucho menos común (entre 1 y 5% de todos los diabéticos) pero más agresiva, y la de tipo 2, la gran mayoría de los casos. Martín Regueiro, residente de Pediatría en el Hospital Universitario Lucus Augusti de Lugo y en rotación en el CHUS, detalla sus diferencias: "La de tipo 1 se caracteriza por una hiperglucemia crónica, es decir, los niveles de glucosa en sangre van a estar siempre elevados por defectos en la secreción y/o acción de la insulina. Es una enfermedad autoinmune, por la cual el propio cuerpo ataca las células productoras de insulina". Se suele detectar en la infancia o la juventud, ya que estas personas tienen una reserva inicial de insulina al nacer que va agotándose poco a poco.

Por otro lado, la diabetes tipo 2 "es normalmente debida a una resistencia a la insulina que se va ganando con los años y que hace que esta no actúe como deberían. Factores que favorecen a ello son la obesidad, mala alimentación, poco ejercicio físico... factores de riesgo cardiovascular", añade el residente.

Ajuste vital complicado

Regueiro ha dirigido a su carrera hacia la endocrinología, participando en diversas actividades organizadas por diferentes asociaciones de pacientes con diabetes, incluida la Asociación de Nenas, Nenos e Xente Nova con Diabetes de Galicia (ANEDIA). De esta forma, tanto en su trabajo como en su tiempo libre, coincide con jóvenes que padecen esta dolencia, cuyo ajuste vital en los casos de tipo 1 –cuyo diagnóstico se hace normalmente en la niñez o adolescencia– puede llegar a ser realmente duro: "Niños más mayores, a partir de los 12 años, ya son conscientes totalmente y entienden lo que explicamos, es un aprendizaje progresivo. Hay que hacerles entender lo que significa tener diabetes, y luego ir poco a poco, con lo que se llama educación diabetológica, a través de sesiones, una al día, como si fueran clases, dónde se explica todo y se les da material para que vayan leyendo, con el objetivo de que se hagan expertos en su enfermedad".

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