Discriminación de niños con diabetes en el entorno escolar
La discriminación que enfrentan niños y jóvenes con diabetes en el entorno escolar es una realidad preocupante que vulnera sus derechos fundamentales y obstaculiza su inclusión plena en la comunidad educativa.
Segregación en comedores escolares
En algunos centros educativos, los estudiantes con necesidades alimentarias específicas, como aquellos con diabetes, son ubicados en mesas separadas durante el almuerzo. Esta práctica, aunque pueda estar motivada por consideraciones logísticas, resulta estigmatizante y refuerza la sensación de diferencia entre los alumnos. Sin embargo, existen alternativas inclusivas, como la implementación de bandejas de colores o la asignación de posiciones específicas en la mesa, que permiten identificar las necesidades especiales sin aislar al estudiante. Estas medidas han demostrado ser efectivas para garantizar la seguridad alimentaria y fomentar la integración social. Durante la pandemia por COVID y para prevenir los contagios los niños permanecieron en grupos de convivencia estable. En muchos colegios se sigue haciendo por dos motivos. Primero por demostrar que los niños con necesidades alimentarias especiales no corren riesgo. Segundo por demostrar que permanecer con sus compañeros de clase durante la comida mejora la experiencia del niño. Existe el reconocimiento de que la segregación respondía a la comodidad del servicio de comedor pero no es la alternativa más adecuada desde el punto de vista psicológico y educativo para responder a la mayoría de necesidad de seguridad alimentaria.
Falta de protocolos y apoyo institucional
La ausencia de protocolos claros y la falta de personal capacitado para atender las necesidades de los estudiantes con diabetes es una problemática extendida. En muchos casos, son los propios padres quienes deben acudir diariamente a la escuela para administrar la insulina a sus hijos, debido a la falta de apoyo institucional. Esta situación no solo representa una carga adicional para las familias, sino que también evidencia una negligencia por parte de las autoridades educativas y sanitarias en garantizar la atención adecuada a estos estudiantes.
